Vea Kaiser es una joven escritora austriaca que ha cosechado notable éxito con sus dos primeras novelas. Los héroes felices es la más reciente y ha sido publicada en español por Alianza de Novelas. Su título original en alemán es Makarionissi oder Die Insel der Seligen, que se podría traducir por Makarionissi o la isla de los bienaventurados.
Los héroes felices es la historia de una familia griega a lo largo de cinco generaciones, y transcurre en paralelo a los principales acontecimientos que han sacudido Grecia desde mediados del siglo XX hasta nuestros días: la ocupación alemana y la guerra civil, la dictadura de los coroneles y el exilio político, la emigración económica, el desarrollo turístico y la crisis financiera actual. Pero no se trata de una novela histórica, ni de una crónica de la sociedad griega en el último siglo, sino de una novela de personajes, de una novela coral. En el centro de la trama se sitúan Eleni y Lefti, dos primos cuyo matrimonio ha sido prefijado desde la cuna por su abuela para salvaguardar la pervivencia de la familia. Sin embargo, estos planes iniciales se revelarán difíciles de cumplir en un mundo cambiante, teniendo en cuenta además el carácter y las circunstancias de los dos protagonistas.
La historia se va construyendo a partir de episodios más o menos extensos entre los que se intercalan largas elipsis temporales. Por lo general los cambios bruscos en la línea argumental vienen determinados por los encuentros y desencuentros sentimentales de los personajes, que provocan en ocasiones reacciones un tanto melodramáticas. En este sentido la novela está próxima a lo que se suele llamar drama romántico, encasillado habitualmente bajo la etiqueta poco afortunada de literatura de mujeres.
Al igual que los personajes, los escenarios de la novela son también muy variados: Hildesheim, una pequeña ciudad industrial alemana, Chicago, Zurich o Sankt Pölten, ciudad natal de la autora en Austria. Pero los polos en torno a los que gira la novela son dos lugares de ficción: Varitsi, un remoto pueblo de montaña griego, cercano a la frontera con Albania, y Makarionissi, una isla con forma de escarabajo volador en el Jónico, que se convertirá en el hogar de buena parte de la familia.
La novela está dividida en nueve cantos, como si de una obra épica se tratara. Aunque son frecuentes las referencias a las viejas leyendas del pasado griego, con las que la matriarca de la familia gustaba de entretener a sus nietos, la vida de los protagonistas no tiene aparentemente mucho de heroico. Y es que la autora se siente más atraída por otro tipo de heroísmo. En lugar de centrarse en esos héroes que jamás mostraban debilidad alguna, no se rendían nunca y se mantenían fuertes hasta el último aliento, prefiere contarnos la historia del héroe que asume las circunstancias, comprende sus errores antes de que sea demasiado tarde y muestra debilidad para ayudar a sanar las heridas de otros.
Los héroes felices es la historia de una familia griega a lo largo de cinco generaciones, y transcurre en paralelo a los principales acontecimientos que han sacudido Grecia desde mediados del siglo XX hasta nuestros días: la ocupación alemana y la guerra civil, la dictadura de los coroneles y el exilio político, la emigración económica, el desarrollo turístico y la crisis financiera actual. Pero no se trata de una novela histórica, ni de una crónica de la sociedad griega en el último siglo, sino de una novela de personajes, de una novela coral. En el centro de la trama se sitúan Eleni y Lefti, dos primos cuyo matrimonio ha sido prefijado desde la cuna por su abuela para salvaguardar la pervivencia de la familia. Sin embargo, estos planes iniciales se revelarán difíciles de cumplir en un mundo cambiante, teniendo en cuenta además el carácter y las circunstancias de los dos protagonistas.
La historia se va construyendo a partir de episodios más o menos extensos entre los que se intercalan largas elipsis temporales. Por lo general los cambios bruscos en la línea argumental vienen determinados por los encuentros y desencuentros sentimentales de los personajes, que provocan en ocasiones reacciones un tanto melodramáticas. En este sentido la novela está próxima a lo que se suele llamar drama romántico, encasillado habitualmente bajo la etiqueta poco afortunada de literatura de mujeres.
Vea Kaiser |
Al igual que los personajes, los escenarios de la novela son también muy variados: Hildesheim, una pequeña ciudad industrial alemana, Chicago, Zurich o Sankt Pölten, ciudad natal de la autora en Austria. Pero los polos en torno a los que gira la novela son dos lugares de ficción: Varitsi, un remoto pueblo de montaña griego, cercano a la frontera con Albania, y Makarionissi, una isla con forma de escarabajo volador en el Jónico, que se convertirá en el hogar de buena parte de la familia.
La novela está dividida en nueve cantos, como si de una obra épica se tratara. Aunque son frecuentes las referencias a las viejas leyendas del pasado griego, con las que la matriarca de la familia gustaba de entretener a sus nietos, la vida de los protagonistas no tiene aparentemente mucho de heroico. Y es que la autora se siente más atraída por otro tipo de heroísmo. En lugar de centrarse en esos héroes que jamás mostraban debilidad alguna, no se rendían nunca y se mantenían fuertes hasta el último aliento, prefiere contarnos la historia del héroe que asume las circunstancias, comprende sus errores antes de que sea demasiado tarde y muestra debilidad para ayudar a sanar las heridas de otros.
Los héroes felices es pura literatura de entretenimiento sin mayores pretensiones, una novela con los ingredientes necesarios para mantener enganchado al lector durante más de 400 páginas, una lectura ideal, en suma, para unas vacaciones como las que acaban de pasar.